23 de octubre de 2008

Escrito de Ale

La ciudad duerme, menos mi cuaderno y yo

los relojes laten pero el tiempo se detuvo

las personas yacen en sus sueños,

aventuras fantásticas de infancias eternas

que vuelven a nacer cuando el lápiz escribe.

Una botella nadando desnuda que me

devuelve un mensaje en blanco.



Un duelo a muerte con balas de caramelo

un reencuentro lejano con un desconocido

una canción perfecta que siempre voy a olvidar

un aroma amarillo que se posa en mi lengua

una mirada de fuego que te empapa con gotas de lluvia,

un beso nunca dado a alguien que nunca lo va a recibir,

la mitad de una vida que nunca sabré que viví.



Alejandro Kurz

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